Aprovechando los mensajes de odio “Tourists go home” que encontramos pintados en distintos barrios de la ciudad de Barcelona y que la propia marca de Airbnb se define como casa/hogar, revertimos el mensaje negativo de la frase interviniendo directamente en las pintadas. Lo hacemos colocando sobre la palabra “home” el propio marco que usan en su página web para mostrar las casas que ofrecen.

En cada marco se escriben distintos lugares icónicos de la ciudad, teniendo en cuenta su cercanía respecto al barrio en que se encuentren los graffitis. Para evitar masificar esos lugares hemos optado por escribir la dirección del sitio sin añadir QR; el cual descubres en caso de que pases por delante de ese mensaje. En conclusión, el graffiti ya no invita a los turistas a irse, sino que les propone un nuevo plan para seguir explorando la ciudad.